Lo habitual es que uno consulte a un médico cuando presenta un síntoma o malestar persistente, que nos preocupa, con el fin de tener un diagnóstico y un tratamiento que cure o alivie nuestra afección. Pero, la mujer no sintomática, ¿debe hacerse regularmente un control de salud?
La respuesta es que la evidencia científica nos dice que esa es una conducta del todo recomendable. “Un examen preventivo o de chequeo en salud es habitualmente una acción o procedimiento sencillo, de bajo costo, que tiene un alto rendimiento, es decir es útil para pesquisar factores de riesgo o enfermedades en etapa asintomática, para tratar y cambiar su pronóstico a corto y largo plazo”, indica el ginecólogo de Clínica INDISA, Dr. Víctor Rubio.
En Chile, la mujer tiene una expectativa de vida que bordea los 80 años, y entre las principales causas de muerte están las enfermedades cardiovasculares y los cánceres de mama, de vesícula y cérvico uterino. Como patologías relacionadas fuertemente con el primer grupo, se encuentran la diabetes, la hipertensión arterial y la obesidad, todas con alta prevalencia en nuestra población.
La manera más eficaz para detectar a tiempo enfermedades severas que se pueden pesquisar oportunamente, tratar y mejorar su pronóstico a largo plazo, es a través de exámenes médicos periódicos.
Desde el punto de vista práctico, las actividades de tipo preventivo se concretan mediante los controles programados cada cierto tiempo y la realización de exámenes de laboratorio o de imagenología definidos para cada etapa de la vida de la mujer. El Dr. Víctor Rubio detalla los principales:
• Control ginecológico: los controles en la mujer adulta comienzan, en general, con el inicio de la actividad sexual y ante la necesidad de emplear un método anticonceptivo eficaz y seguro.
El análisis de la historia personal y familiar, desde el punto de vista médico, permite identificar algunos factores potenciales de riesgo en salud, que serán útiles para educar acerca de cómo corregir y disminuir su impacto.
“Debe realizarse cada 1 o 2 años, desde el inicio de la actividad sexual hasta la postmenopausia. Naturalmente, en cada etapa de la vida la complejidad de los exámenes de pesquisa se va adaptando a los riesgos potenciales de cada una de ellas”, detalla el Dr. Víctor Rubio.
• Papanicolau: debe efectuarse periódicamente, a partir de los 25 años en general. Permite detectar lesiones precancerosas, causadas por el virus del Papiloma Humano en el cuello del útero. El examen consiste en recolectar células del cuello uterino con una tórula de algodón o un cepillo muy fino, permitiendo detectar el cáncer cervical o descubrir cambios en las células del cuello uterino que en el futuro podrían producir cáncer. Su periodicidad ya no es necesariamente anual, y esto depende de los factores de riesgo en cada caso. “La detección temprana de estas células anormales permite instaurar un tratamiento eficaz y mejorar el pronóstico del cáncer cérvico uterino, que aún causa un número importante de muertes de nuestras mujeres en Chile”, explica el ginecólogo de INDISA.
• Mamografía: es una radiografía clave para el diagnóstico precoz del cáncer de mama. Este constituye la primera causa de muerte por cáncer en la mujer en Chile (alrededor de 1.000 casos por año). El Dr. Víctor Rubio detalla que estas imágenes permiten analizar el estado de las mamas y detectar cualquier quiste o tumor que muchas veces, por su tamaño, son imperceptibles al tacto o al autoexamen.
Debe hacerse una vez al año a partir de los 40 o antes si hay antecedentes familiares de riesgo. En algunos casos, se requerirá la realización de una ecografía mamaria complementaria para precisar mejor la naturaleza de las lesiones mamarias.
Además, de manera adicional, mensualmente toda mujer debe practicarse el autoexamen mamario.
Mira la importancia de la mamografía haciendo click en este video.
• Controlar la diabetes: los síntomas de la diabetes tipo 1 surgen de manera repentina, de ahí la importancia del control anual del nivel de glucosa en la sangre. Estos niveles anormales se detectan con un examen de sangre en ayunas, que se debe hacer después de los 25 años, o antes si existen antecedentes familiares o si se tiene obesidad.
Cuando la glicemia en ayunas sale alterada o dudosa, se deberán realizar exámenes complementarios, como la curva de tolerancia a la glucosa o la hemoglobina glicosilada, que muestra el comportamiento de las glicemias en las semanas precedentes.
Lee sobre diabetes y sus síntomas en esta nota.
• Control de la presión: dada su prevalencia en la población general y su incremento con la edad, controlar la presión a lo largo de la vida es esencial para evitar las complicaciones a largo plazo en diferentes órganos del cuerpo humano. Por eso, la toma de presión periódica (una vez al año) permite detectar los posibles pacientes asintomáticos, quienes requieren estudios complementarios.
La presión arterial alta detectada en etapas precoces se puede controlar con medidas simples como: bajar de peso, disminuir la sal de las comidas y dejar de fumar.
Conoce la importancia de regular tu presión aquí.
• Controlar el colesterol: el colesterol alto es uno de los principales factores de riesgo para enfermedades cardiovasculares. Es recomendable controlarlo a partir de los 30 años y antes si hay antecedentes familiares, se tiene diabetes y/o hipertensión arterial. Con la misma muestra de sangre utilizada para la glicemia, se hace un perfil lipídico donde se pueden detectar niveles elevados de colesterol y triglicéridos. Niveles altos aumentan el riesgo de infartos al corazón o cerebrales por obstrucción de las arterias. El colesterol igual o mayor a 200 mg/dl implica la necesidad de una alimentación saludable y promoción de actividad física. El colesterol HDL idealmente debe estar cercano a 60 y el LDL bajo 100.
En la misma línea, el Dr. Víctor Rubio puntualiza que aparte de los exámenes mencionados es muy relevante que las mujeres no abandonen, por ningún motivo, los tratamientos de enfermedades crónicas y no suspendan la terapia menopáusica, ni los chequeos rutinarios mensuales de embarazo.
Atención en Clinica INDISA
Actualmente, Clínica INDISA ofrece diferentes formas para que las mujeres puedan hacerse sus respectivos exámenes ginecológicos. La primera opción es mediante consultas médicas presenciales, las cuales siguen abiertas en Clínica INDISA.
Por otro lado, ante cualquier problema que no sea de extrema urgencia, ni de gravedad, nuestros especialistas están atendiendo a través de la Consulta Online, como parte de nuestros nuevos servicios de Telemedicina, para que las pacientes puedan recibir atención desde su casa mediante una videollamada, sin necesidad de exponerse. y sin tener que exponerse. “Esta es una excelente herramienta para las urgencias intermedias o para controles de tratamientos crónicos que está teniendo una aceptación creciente”, detalla el Dr. Víctor Rubio.
Dr. Victor Rubio Arancibia
GINECOLOGÍA
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