Es una lesión común en la columna lumbar, espacio lumbro sacro y en menor medida, columna cervical. Consiste en la salida o protuberancia del material viscoso interno de los discos intervertebrales, llamado núcleo pulposo hacia la parte posterior o lateral del disco. Suele producirse por una acumulación de carga excesiva y reiterada de presión en esa zona, por ejemplo, por actividad deportiva o laboral. Dependiendo de hacia dónde salga este material, puede sólo producir dolor, o comprimir raíces raquídeas, en este último caso será percibido como hormigueo. Si es en la columna cervical se llamará cervicobraquialgia y si es en la columna lumbar o lumbosacra se llamará lumbociática. El tratamiento suele ser conservador, a través de kinesioterapia, aunque en casos más graves y con diagnostico tardío se llega a la cirugía, la cual es en la mayoría de los casos, confiable.

Consiste en una alteración de la alineación normal de la columna cuando el punto de vista es lateral o posterior. Esta, puede ser de varios tipos: la más leve es la actitud escoliótica, en que la columna no tiene alteraciones en si, por lo que la desviación observada se debe a una diferencia de longitud de miembros inferiores, o sólo a una mala postura, esta se corrige flectando la columna. En cambio, en la llamada escoliosis idiopática existe una alteración en la forma de las vértebras, que lleva a angulaciones de más de 15 o 20° grados. El tratamiento puede durar años, hasta que termina el crecimiento, y lo realiza un ortopedista desde la adolescencia, el cual consiste en el uso de corset, complementado con ejercicios para mantener la flexibilidad y otras capacidades físicas. En casos de más gravedad, en que la deformación continúa aumentando, puede llegarse a la cirugía.

Tanto en lesiones como en otro tipo de enfermedades, el término estenosis hace referencia a un estrechamiento de un conducto o espacio cerrado. En este caso, se refiere al estrechamiento del canal medular o del canal raquídeo, un espacio cilíndrico cerrado que protege la médula espinal y la salida de las raíces nerviosas, desde la base de la cabeza hasta la zona lumbar, debido a causas degenerativas del tiempo y sobreuso, hacen que partes de las vértebras o discos tengan engrosamientos que estrechan esos espacios. Según el grado de estrechamiento, los síntomas puede ir desde molestias ocasionales, sensaciones parestésicas como hormigueo hasta limitación severa de la movilidad, que impida incluso caminar o permanecer sentado. El tratamiento es variado, incluye fármacos generales, locales, tratamiento kinésico, y, en algunos casos, cirugía.

Es una de las principales causas del dolor lumbar en adultos jóvenes y mayores. En medicina el sufijo osis deriva de artrosis, por lo tanto, esto corresponde a artrosis de la columna, es decir, un desgaste degenerativo de las pequeñas articulaciones que hay entre cada vértebra (articulaciones apofisiarias) y que se evidencia en radiografías con pequeños cachos de hueso llamados osteofitos. Suele acompañarse de varios procesos, como una limitación de movimiento, inestabilidad articular, que se evidencia ocasionalmente con ruidos tipo crack) y dolor global difícil de localizar. Su tratamiento de elección es el kinésico, a través de ejercicios de estabilización y aeróbicos.

Es un término genérico, que significa dolor en la zona lumbar. No representa una lesión en particular, sino que es un conjunto de condiciones que tienen en común generar dolor en la parte baja de la columna. Entre las causas más comunes del lumbago se encuentran: la espondilosis lumbar, hernia al núcleo pulposo a nivel lumbar, síndrome de dolor miofascial, raquiestenosis y espondilolistesis. Cuando el lumbago no tiene componentes a la raíces nerviosas, ni un componente sicológico, sino que una lesión articular relacionado con esfuerzos físicos, se le suele llamar lumbago mecánico.